-La educación del
talento, José Antonio Marina.
“Para educar a un niño
hace falta la tribu entera” Marina añade que para educar BIEN a un niño hace
falta una BUENA tribu, y plantea la educación individual, la educación a cada
individuo por parte de su familia, padres, profesores, sino también reflexionar
acerca de nuestra sociedad y de cómo esta “tribu” nuestra o cómo queremos que
sea para poder educar bien.
Educar
para el talento se refiere a lo siguiente:
educamos para obtener buenos resultados escolares, sino buenos resultados
vitales fuera de la escuela. A todos nos gustaría tener talento, nos parece
deseable, y hacemos de él el objetivo de la educación de los individuos y
colectividades.
Hay muchos talentos distintos, (musicales,
financieros, atléticos, etc.) lo mismo que hay inteligencias diferentes, sin
embargo hay una inteligencia superior que deberíamos poseer todos, porque es
nuestro supremo recurso, la que administra y gestionan el resto de talentos, la
inteligencia práctica.
Saber usar bien la inteligencia es nuestro
gran poder.
El
objetivo del libro es explicar cómo funciona la inteligencia, para mejor
gestión de nuestra propia vida, también a través de la reflexión pedagógica que
realiza a enseñarnos a enseñar tanto a padres como a educadores de una manera
eficaz y efectiva, en un mundo que nos exige más, competencia, talento, trabajo
, esfuerzo, felicidad y una buna vida social y familiar. El planteamiento del
libro además, es muy ameno, didáctico, de fácil comprensión y muy interesante.
Podría decir que abras por la página que abras del libro y sin saber apenas
nada, por lo penos una reflexión interesante vas a encontrar. Me gusta el sistema de diálogos que utilizan
en varias ocasiones y que también ha utilizado en alguno de sus libros Bernabé
Tierno, también interesante educador, con teorías muy prácticas.
Este libro plantea que nuestra inteligencia
está dividida en varios niveles:
La inteligencia generadora, es la que produces
sentimientos, ideas, deseos, conscientes, es la fuente de nuestra vida
consciente.
La inteligencia ejecutiva, es la que
supervisa, evalúa y dirige la acción.
2.- LA INTELIGENCIA GENERADORA
Los científicos dicen que nuestro cerebro no
descansa nunca, que continuamente esta elaborando, relacionando y conservando
información.
El
primer objetivo de la educación debería ser ayudar a los educandos para
que su cerebro se convierta en una fuente generadora de ideas brillantes,
deseos adecuados, sentimientos animosos y alegres, imágenes expresivas,
discursos...
Pero con más frecuencia olvidamos
otros dos factores que condicionan igualmente la educación de nuestros hijos
(en general, la educación como habilidad para aprender y desarrollar nuestras
potencialidades, sea cual sea nuestra edad), como son la cultura y la sociedad.
Y en concreto nuestra actual sociedad del deseo y el consumo, y que tantos
daños a nuestros niños y nuestra sociedad están creando. Si no nos replanteamos
nuestros valores y nuestra esencia educativa, vamos a conseguir educar a niños
infelices que no podrán llegar atodas
las necesidades y exigencias de la sociedad.
Con ello
no quiero dar un mensaje pesimista, que además no es el tono ni el mensaje del
libro. Todo lo contrario, el libro nos traslada el poder y al responsabilidad
de poder hacer y hay mucho que hacer, con alegría y disfrute y con realismo y conocimiento
de la situación.
En general el libro me
ha encantado y me ha aportado mucho a nivel profesional pero también personal.
Me ha hecho reflexionar y pensar. Se ha convertido en uno de mis libros de
cabecera y lo recomiendo cien por cien.